Dependiendo de la época de mi vida, siempre hay un mes que me gusta más y uno que me gusta menos. Tradicionalmente, el mes que siempre me ha gustado ha sido febrero. No sé muy por qué, quizás porque tengo buenos recuerdos… ¿o porque dura menos? En cuanto a los que menos me gustan sí ha cambiado bastante. Actualmente, septiembre me pone un poco de los nervios.
No sé si será la vuelta al cole, o que todo el mundo vuelve y lo quiere todo rápido y bien. Por eso a mí siempre me gustó irme de vacaciones en septiembre y evitar todo este rollo. Pero ahora con un niño no es posible, tengo que tragarme la vuelta al cole en primera línea. Y septiembre es también un mes de lista de tareas. Tenemos pendiente esto, lo otro y lo de más allá. Y la lista crece y crece, como si el tiempo fuera infinito.
Una tarea que ha recaído en mí este septiembre es buscar seguros dentales para familias. Nuestro hijo ha crecido y ya tiene que ir al dentista. De momento, cada uno iba a un sitio, pero hemos decidido que lo más adecuado y, probablemente, rentable sea que vayamos todos al mismo dentista. Pero no es sencillo encontrar uno que guste a todos y que ofrezca un buen servicio por un precio no demasiado elevado.
Además, somos de los que les gusta improvisar, así que estoy mirando solo empresas con prestigio. Hasta ahora yo iba al típico dentista que tiene una clínica y ya está. No sé si es mejor o peor que los demás, pero yo me acostumbré a él y preferí no cambiar. Ya se sabe que con lo de la boca no apetece mucho ir de sitio en sitio.
Pero ahora que tengo que buscar seguros dentales para familias lo más probable es que deje de ir a este dentista. El que tiene más papeletas es el de mi mujer porque parece que ofrecen un buen servicio para familias y eso es lo que necesitamos en este momento, además de que tienen un equipo médico bastante amplio.