El renting ha marcado un antes y un después en el sector de la automoción. Pero el alquiler de vehículos a largo plazo no es una novedad. Se remonta a principios del siglo XX en Estados Unidos, mientras que su aparición en España fue tardía, en la década de los noventa.
El actual boom de Ofertas Renting coches para Particulares comenzó en los años 1960-70, orientada al sector del transporte: taxis, autocares, etcétera. Esto debido al coste elevado de los vehículos de la época, cuya variedad era más escasa. A diferencia de lo que sucede hoy, las compañías de renting no entregaban sus vehículos hasta que el cliente no había abonado 3-4 cuotas en concepto de fianza.
Se estima que este modelo de arrendamiento apareció por primera vez en la compañía telefónica Bell Telephone System hacia 1920. Parte de la clientela de la empresa fundada por Alexander Graham Bell no podía permitirse sus dispositivos de teléfono, y se optó por permitir su alquiler en plazos duraderos.
El exitoso uso del renting por Bell Telephone System motivó que empresas de otros sectores, incluido el de transportes, copiasen y adaptasen la idea a su producto, cliente y nicho de mercado. En pocas décadas el concepto emigró desde Estados Unidos para instalarse en el continente europeo, especialmente en países que, a diferencia de España, carecían de una sólida cultura de propiedad privada.
Por esta razón, la llegada y aceptación del alquiler de vehículo a largo plazo se postergó tanto en nuestro país. Oficialmente, fue el 30 de octubre de 1995 cuando se fundó la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), para respaldar legalmente este modelo de negocio y defender a las empresas practicantes de renting. Pese a su tardía introducción, se estima que la flota de vehículos de renting supera hoy las 500.000 unidades, nada menos.