¿Tienes antecedentes de cáncer de colon en la familia?

por | 21 mayo, 2019

La deteccion cancer de colon a tiempo es fundamental para conseguir más esperanzas de éxito en su curación. Y para conseguir detectar a tiempo este cáncer se han elaborado distintos protocolos para personas que pueden tener un riesgo de contraerlo.

En este grupo de personas con riesgo están quienes han sufrido este cáncer con anterioridad y también están los que tienen antecedentes familiares ya que se cree que en muchos casos la herencia genética es determinante.

Por eso, cuando se detecta un caso de cáncer de colon, es habitual que el médico de familia recomiende a los familiares más cercanos que tengan una edad determinada la realización de pruebas para que se queden más tranquilos al respecto o para detectarlas posibles complicaciones antes de que el cáncer avance.

Los protocolos en estos casos suelen combinar la realización de colonoscopias cada cierto tiempo con otras pruebas que pueden resultar de gran ayuda y que son más sencillas de realizar. Estos protocolos se establecen en función de la edad y del grado de riesgo detectado.

Por ejemplo, mientras que algunas personas deben de realizarse una colonoscopia cada dos años, otras pueden realizarse pruebas de heces para detectar sangre y analíticas. Si algo va mal en estos casos, es cuando se procede a realizar la colonoscopia para ver qué está ocurriendo.

No hay por qué preocuparse por que el médico pida que se realicen estas pruebas. No quiere decir que necesariamente se tenga que sufrir un cáncer de colon en algún momento de la vida, tan solo es una política médica de prevención que no debe de asustar a nadie.

Incluso en el caso de que puedan aparecer restos de sangre en las heces, esto tampoco es necesariamente un síntoma de cáncer de colon definitivo, sino que puede haber otras causas que originen el sangrado y que van desde las hemorroides internas hasta la ruptura de algún vaso capilar, algo que es especialmente frecuente en personas de más de 65 años.

Una de las causas de sangrado puede ser los pólipos, que muchas veces pueden ser retirados durante la colonoscopia, aunque en otras ocasiones requieren de una pequeña intervención posterior. Tras su extracción, son analizados para descartar que puedan un síntoma de algo maligno. Muchas personas que han desarrollado pólipos no desarrollan cáncer de colon, por lo que tampoco hay que tomarse su aparición como una confirmación de nada malo.