Decora tu oficina de forma muy moderna y atractiva

por | 9 febrero, 2022

Una oficina moderna tiene que tener una imagen moderna y atractiva, sobre todo si está dedicada a actividades actuales que atraen a un público joven. La decoración de estos espacios es muy importante y pueden marcar la diferencia a la hora de conseguir llamar la atención, sobre todo cuando se trabaja en campos muy competitivos.

Pinta la oficina en tonos divertidos y con mucha luz. Juega con los colores y no tengas miedo a crear, por ejemplo, una pared a listas. Puedes también optar por unas paredes más discretas pero destacar una de ellas con un papel pintado original y diferente que llame realmente la atención. En lugar de papel pintado se puede jugar también con vinilos decorativos que le den toques especiales a diferentes rincones del despacho, consiguiendo una imagen impactante en ciertos lugares y haciendo que la atención se centre exactamente en los puntos que se desea.

El estor fotográfico es el más adecuado para las ventanas. Hay que elegir imágenes corporativas que también formen parte de la Web y que hagan que desde fuera ya se pueda distinguir el negocio y se identifique totalmente con el mismo. Solo ver esas imágenes la gente tiene que saber ante qué está. En algunos casos, el estor puede ser blanco con el logotipo de la empresa en el centro, una opción elegante y que siempre es acertada, independientemente del tipo de negocio que se esté defendiendo.

Para los muebles, lo mejor los lacados en tonos claros o la madera natural en tonos de tendencia, evitando los caobas que siguen viéndose demasiado clásicos y los negros porque pueden hacer que el despacho se vea más pequeño o menos luminoso. El cristal es también un material a tener en cuenta tanto por su aspecto moderno y actual como por el hecho de ser perfecto en un despacho pequeño al hacer que se vea más espacioso.

Las formas originales pueden ser una buena opción siempre que sus líneas no sean un problema para la distribución del espacio. Mesas ovaladas o estanterías con diferentes alturas pueden dar ese aire desenfadado y de vanguardia a un despacho en el que tienen que sentirse cómodos tanto los que trabajan allí como los que acuden como clientes. Por eso, no hay que descuidar las sillas de cortesía o los espacios para sentarse con los clientes para charlar o ver material.